Alma,
corazón y esfuerzo son herramientas que no faltan en los 20 trabajadores de
Industria Canaima, quienes están abocados a la tarea de ensamblar las
computadoras portátiles en el Complejo Tecnológico Simón Rodríguez, situado en
La Carlota, Caracas, desde donde son distribuidas a las escuelas públicas del
país en articulación con la empresa de telecomunicaciones Cantv.
Marcos Arismendi es uno de
esos compañeros enamorados de su trabajo, quein este miércoles manifestó
sentirse orgulloso de estar aportando una semilla para la revolución:
"porque se trata de una innovación tecnológica al alcance de los niños
para estudiar, avanzar y ser mejores venezolanos en el futuro", expresó.
Este joven se unió a la
celebración del ensamblaje de la Canaimita número 100 mil, correspondiente a la
primera fase de la industria nacional llevada a cabo en dicho complejo.
La actividad contó con la
presencia del ministro para Ciencia y Tecnología, Jorge Arreaza y del
viceministro de Telecomunicaciones, Informática y Servicios Postales y
presidente de Cantv, Manuel Fernández, así como Alexis Figueroa, encargado de
esta primera etapa de la empresa.
Otro trabajador, Edwin
Piñerúa, explicó que la rutina de ensamblaje comienza con el ingreso de los
componentes al sistema, tales como memorias, baterías, teclados y cargadores,
que se colocan en una bandeja para enviarlos a la sección para atornillar y
fijar piezas y etiquetas; luego se entra a la fase de verificación inicial para
después activar un programa de software
Después de una hora
aproximadamente el dispositivo pasa a las pruebas de optimización -explicó-,
para ensamblarlo en su caja y etiquetarlo con un sello de seguridad. Precisó
que, a diario, se ensamblan entre 575 y 600 máquinas aproximadamente.
Para estos trabajadores,
ensamblar una Canaimita es "como vestir a una hija", por eso, Peñerúa
solicitó: "Valoren nuestro esfuerzo y cuando llegue a sus casas una hija
de nosotros trátenla con responsabilidad".
Estos operadores se iniciaron
en el proyecto hace poco más de un año y para realizar sus funciones recibieron
adiestramiento con asesoría de facilitadores portugueses.
A mediados de 2009, el
Gobierno Bolivariano puso en práctica el Proyecto Canaima, para promover el uso
educativo de las tecnologías de la información y la comunicación en los
estudiantes de escuelas primarias, para lo cual se suscribió un acuerdo entre
Venezuela y Portugal para la importación de computadores portátiles.
El acuerdo incluye la
transferencia tecnológica, con el propósito de formar a venezolanos para la
fabricación de los computadores en el país.
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